Keith Haring es uno de los artistas más relevantes dentro del ámbito del arte público mural contemporáneo, realizando obras de grandes dimensiones en ciudades como Berlín, París, Nueva York, entre otras.
En febrero de 1989 Haring viajó hasta Barcelona para realizar un mural dedicado a la lucha contra el Sida, siendo esta una temática muy utilizada por el artista en los últimos años antes de su muerte. El mural fue titulado «Todos juntos podemos parar el Sida» y el lugar que él eligió para pintarlo, fue en la plaza Salvador Seguí. Haring decidió que el Raval era el lugar idóneo por las características que presentaba de marginalidad y problemática frente al VHI, plasmando su creación en un muro de un edificio en ruinas, donde diariamente se podían encontrar gran cantidad de jeringuillas utilizadas por toxicómanos.
«He tardado cinco horas en pintarlo, como había previsto. La pared tenía una inclinación extraña en la que era difícil pintar, pero una de las cosas que más me gustan de este trabajo es la adaptabilidad (física) que requiere. He encontrado una postura que me permitía pintar de una forma homogénea y equilibrada. Algunas de las mejores fotos de este mural reflejan el lenguaje del cuerpo y las posturas que adopto para pintar.» Fuente: Museu d´Art Contemporari de Barcelona
La composición del mural está formada por un grupo de siluestas humanas, tan característico de su obra, que parecen que huyen de una serpiente gigante, la cual tiene enroscada con su cuerpo una jeringuilla y junto a ella aparece escrita la palabra Sida. A su vez una tijera, formada por el cuerpo de dos personas corta el cuerpo del reptil, y en la cola podemos apreciar como vuelve a enrollar a una pareja y finalizada dibujándole un preservativo al final del cuerpo. A continuación dibuja otro grupo de siluetas unidas por las manos, junto con la frase «todos juntos podemos para el Sida». Utilizando únicamente el color rojo para realizar la composición.
Haring concebió el mural como una obra efímera, además debido a las malas condiciones que presentaba el muro y los sucesivos ataques bandálicos que sufrió la pintura, la obra se deterioró rápidamente. Se decidió hacer un calco del mural en 1992, ya que el Plan Especial de Reforma Interior del barrio del Raval iba a derribar el muro. De esta manera, en 1996 y 1998 el MACBA volvió a reporducir la obra nuevamente.
Este año, cumpliéndose el 25 aniverasrio de la creación de la obra de Haring en Barcelona, el MACBA junto con Keith Haring Foundation y el Ajuntament de Barcelona han decidido volver a reproducir la obra en un muro exterior junto al museo.
Os dejamos este link donde podeis observar como Haring pintó el mural en Barcelona


